Homenaje a Diana Siguel de Turjanski

Adriana Sorrentini¹

En estos años de pandemia y cuarentena, la falta de encuentro semanal en APA produjo gran alteración en nuestras vidas; la ausencia de la presencialidad en las intensas actividades de la institución produjo efectos de deprivación en todos nosotros, que no sospechábamos tal vez cuán importantes eran nuestros habituales encuentros. 

            Es así que de cada comunicación que recibíamos, la que cumplía con informar el fallecimiento de un colega provocaba un fuerte impacto emocional. Los decesos no fueron todos por causa del Covid-19, no; muchos se debieron a dificultades de salud de cada uno. Pero no caben dudas de que fueron agravados por las condiciones de encierro y aislamiento que tanto daño han provocado.

            En APA somos muchos, algunos más cercanos y amigos que otros… todos valiosos y queridos, pero perder amigos es sumamente duro, más aún sin la posibilidad del abrazo, la charla, la presencia. Algunos nombres fueron estremecedores… ¿¡cómo!?, ¿¡cuándo!?, ¿¡por qué!? Muy difícil de creer, casi imposible, y sin despedida, sin rituales que ayudaran a elaborar el duelo. Hoy me toca despedir a una amiga entrañable.

            Un aciago día, 13 de octubre de 2021, la sonrisa de mi amiga se congeló.

            Y en el informe de APA apareció un nombre: Diana Siguel… Dolor, incredulidad; hubo que corroborarlo varias veces y dejar surgir la sucesión de imágenes y recuerdos de tantos años compartidos. 

            Por ser su amiga, sabía de su enfermedad, pero no esperaba tan cerca el desenlace. Sí, hacía tiempo que no salíamos a caminar, a tomar algo o compartir un frugal té-cena. Nos lo prometíamos en cuanto fuera posible, pero no lo fue… ni lo será.

            Durante diez años (1973/1983) fue docente del Instituto Ángel Garma, colaboradora de seminarios de Fidias Cesio; allí nos conocimos. En 1991/1992, coordinó el Departamento de Niños y Adolescentes. Integró varias comisiones, como las de Enseñanza sobre análisis didáctico, la de Asesores de Secretaría Científica, subcomisión de Promoción, la Comisión Ad Hoc de Lectura de Trabajos Científicos (1996/1997) y el Instituto sobre “Supervisiones”, además la de Investigación acerca de la Función Didáctica (1999/2000). Integró el Jurado del Premio Arminda Aberastury en 2004 y del Premio Luis Storni el año siguiente.

            Formó parte de la Comisión de Ética en 2014. En fin, siempre activa, entusiasta y participante en nuestra amada institución.

            Nuestra amistad transcurrió siempre serena y ligada al psicoanálisis. Tanto en su casa de Melian, en las reuniones de estudio y debate junto a su esposo y colega Ernesto Turjansky, en las reuniones sociales tan divertidas, algunas salidas de los cuatro, descontracturadas.

            Participó siempre e intensamente en nuestra revista La Peste de Tebas, aportando sus trabajos y enriqueciendo las mesas redondas con sus agudas observaciones y debates.

            Pinamar albergó otra etapa muy divertida y compartida, de vacaciones y escapadas; teníamos una prometida, que no pudo ser. 

            Un día decidió mudarse a una vivienda más acotada que la inmensa casona de la calle Melian, y nos reuníamos entonces en su acogedor departamento de la Av. Luis María Campos, cuyo amplio balcón albergaba nuestras largas charlas de las cuales hijos y nietos eran nuestros protagonistas preferidos. Cuando me iba, insistía en acompañarme hasta tomar un taxi “porque ya era de noche”. Sus cuidados, charlas y alegría permanecerán en mi corazón y mi memoria mientras esté en esta Tierra… ¡Abrazo grande, Diana!

¹ adriana.sorrentini@gmail.com. Miembro de la Asociación Psicoanalítica Argentina. 

Descriptores: OBITUARIO / HOMENAJE

 

Keywords: OBITUARY / TRIBUTE

 

Palavras-chave: OBITUÁRIO / HOMENAGEM